El tema del cierre de la librerías se ha puesto en boca de todos ante esta situación, aderezada por la noticia confirmada ayer mismo que McDonalds se queda con el local de Catalonia. Vamos que cambiamos libros por hamburguesas, lo que (como leía en bastantes tuits) es una metáfora muy gráfica de la realidad que vive hoy el mundo editorial.
El cierre de librerías ha dado para muchos comentarios, como decía anteriormente, y ha sido analizado desde muchos y muy diferentes puntos de vista. Desde profesionales del sector como Manuel Gil en su blog, a muchos medios de comunicación, por ejemplo aquí y aquí.
Como muchos de mis amigos y contactos del día a día están de una u otra manera vinculados al mundo editorial, sus análisis están condicionados por muchas y diferentes cuestiones, por eso he estado hablando estos días con muchas personas a través de Facebook, twitter, una llamada o un café, acerca de estas cuestiones, y he llegado a unas conclusiones de andar por casa. Aunque más bien son una lista de las razones más repetidas que me han dado estas personas, por las cuales casi nunca visitan una librería.
Cabe destacar, que todas las personas con las que he hablado leen, por lo menos 4 libros al año. y han respondido a la pregunta unas 35 personas, lo dicho, de andar por casa...
1. Las librerías son, en su mayoría todas iguales. Y lo mismo pasa en las Ferias y ventas especiales como Sant Jordi.
Excepto las especializadas (que no son muchas y si están muy especializadas se reducen sus compradores potenciales), la mayoría de las librerías tienen los mismos libros. Los Best Sellers del momento y poco más, si buscas algo un poco más concreto no está en las estanterías. Es un problema de espacio, hay el sitio que hay y hay que elegir lo que se vende, y muchos no van a arriesgar nada, van a lo seguro.
2. Hay pocas librerías de fondo, y si lo están es en las grandes ciudades, lo que dificulta la posibilidad de encontrar libros que se publicaran más allá de 2011 y libros de temáticas concretas, es más fácil encontrar estas publicaciones en Internet.
3. Muchas librerías carecen de personal especializado y no ayudan al público en sus elecciones. Aunque es una de las respuestas que me han dado, y creo que no es cierto al 100%, si es verdad que a menudo nos llegan quejas de autores a los que les ha llegado la información que x librería ha dicho a un cliente que sus obras están descatalogadas, cuando no es cierto. ¿Desidia? quien sabe... igual es poco rentable hacer un par de llamadas para pedir un ejemplar, o conectarse a Dilve es algo todavía poco extendido.
4. El tiempo y la distancia. Es curioso pero muchos lectores me hablan de como les ha cambiado la vida con los hijos y que el poco tiempo libre que les queda no lo invierten en visitar librerías. La compra de libros la hacen por internet, y por la noche cuando los peques duermen. Es más cómodo y rápido y dedico mi tiempo a otras cosas.
5. Muchos comentan también que normalmente leen lo que otros recomiendan, así que lo encargan o lo piden a Amazon.
Bueno, estas son las conclusiones de andar por casa, que un grupo de amigos y contactos nos han mandado a la pregunta que hicimos en Facebook acerca de porque la gente deja de ir a las librerías. Ni es científico ni pretende serlo, solo hacernos pensar en nuestra profesión y negocio.
No he incluido la respuesta más generalizada, y desde mi punto de vista la verdadera razón por la que las cosas están así de mal, y es que muchos de ellos están leyendo libros que les han prestado o regalado, o los buscan en bibliotecas o los bajan de internet, porque hay que ajustarse el cinturón. El consumo ha bajado en todo, incluida la alimentación, y los libros no se comen así que tendremos que pensar y reinventar mucho a lo largo de 2013. América será aun más importante para nuestro sector y es la gran oportunidad para que los eBooks empiecen a tener la importancia debida en nuestro volumen de negocio.
Espero que esto nos haga pensar y mejorar, a mi me ha ayudado.
Abrazos
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